El Vigésimo Cuarto

La madrugada del pasado jueves 22 de noviembre ejecutaron brutalmente a otro policía en Aguascalientes. Vemos con horror como este tipo de hechos se presentan cada vez con mayor frecuencia, al tiempo en que las autoridades, en lugar de haber acopiado algo de experiencia siguen brillando por su inutilidad. Vamos por partes:
Este último agente acribillado, de nombre Andrés Cano, viajaba solo en su patrulla. Recordemos que después de las constantes ejecuciones que se han registrado a lo largo de este año, los policías comenzaron a circular en parejas. A últimas fechas se les veía de nueva cuenta solos.
El procurador de justicia del estado se aprestó de inmediato a sentenciar que el policía asesinado seguramente tenía nexos con el crimen organizado. Esto no sería nada raro, a no ser porque esta afirmación la hizo a muy pocas horas de ocurridos los hechos, lo que nos deja la sensación de que fue un comentario hecho a la ligera; esto desató la irritación entre los uniformados municipales, que de inmediato salieron en defensa de su compañero caído y aseguraron que este tenía un modo de vida humilde; sea como sea, este asesinato se suma a una larga cadena de ejecuciones que ha golpeado duramente a la Policía Municipal de Aguascalientes, mientras la PGR y la AFI están más ocupados en decomisar discos piratas en los tianguis, o "presumiendo" la detención de miserables narcos de quinta a los que les aseguran un par de dosis. ¡por favor! Esto ya lo había comentado en otro post, está muy bien, deténganlos, así tengan en su poder un gramo de droga... pero, ¡hagan lo mismo con los siguientes eslabones, por Dios! Es desesperante a los ojos del ciudadano común el observar cómo la delincuencia se ha vuelto brutalmente peligrosa y las autoridades prefieren voltear la mirada hacia otro tipo de delitos, donde no hay que jugarse el pellejo. Bah! El marcador ahora indica que van 13 policías municipales muertos... en tanto, la PGR-AFI tienen en su récord, mmm... ¿ropa usada, discos piratas y algunos gramos de droga? vaya...